¿Si pienso, existo?

La filosofía es una ciencia que de forma cuidadosa y detallada, busca dar respuesta a una variedad de interrogantes como por ejemplo, la existencia, la mente, la moral, la belleza, el conocimiento, la verdad y el lenguaje. Trata de alejarse de lo espiritual y de la mitología al enfocarse en pruebas racionales más que en argumentos de autoridad.
Filosofar es la simple actividad de pensar, con el ingrediente de que no tiene límites, es el arte de pensar en lo que sea. El filosofar no tiene objeto, cuando se propone alguno, pensar en torno a este objeto en cuestión se lo denomina reflexión.
Ya dijimos que filosofar implica pensar, esto introduce una duda, que al mismo tiempo desata otras preguntas por contestar, como por ejemplo: ¿Qué pasarías si?, ¿Por qué las cosas son así?, etc.

Lo curioso es que uno generalmente filosofa en las situaciones más raras y lugares inusuales, por ejemplo en el baño, después de una fiesta, etc. Una de las razones por las que puede pasar esto es que vivimos en un mundo donde estamos saturados, todo el tiempo tenemos que hacer algo, con lo que estamos haciendo, se considera que el tiempo que no estamos trabajando, es tiempo perdido, pero quizás estamos equivocados, ya que siempre hay que tener tiempo para despejarse, para no hacer nada. Por eso es que la actividad de filosofar tiene cada vez más valor, nos permite imaginar, esto lleva a que nazcan nuevos inventos, porque alguien se animó a romper con la barrera de lo común, además nos permite quizás resolver problemas más comunes o encontrar respuestas a preguntas del día a día.

Se podría decir que está en el plan de estudio en sexto año porque intenta hacer pensar a los alumnos, por medio de la reflexión, intentando responder preguntas muy complejas y que sus respuestas son inciertas. Promueve el pensamiento propio, hace que cada uno forme una idea y un pensamiento propio, ya sea de la realidad, sobre nuestra existencia, el sentido de la vida o cualquier otra pregunta que ni siquiera los grandes filósofos pudieron dar una respuesta que sea universalmente correcta, ya que los contenidos sobre la filosofía son subjetivos, por eso, esta materia nos invita a pensar y a formar un pensamiento propio, para que así enfrentemos la vida de otra manera, como a cada uno le parezca. Por eso me gusta pensar que en las clases de filosofía soy un pequeño filósofo que busca dar respuestas a preguntas que quizás no las tienen.    

Podría ser que la materia está en sexto año porque los adolescentes ya tienen cierto grado de maduración para poder elaborar ciertos conceptos.

Saber, pensar, saborear:

Se podría decir que el saber es el conjunto de conocimientos que alguien tiene, en cambio, pensar requiere no tener conocimiento de algo, cuando los saberes no son suficientes, en este pensamiento quizás surjan más preguntas que respuestas, ya que no se tiene conocimiento del tema en cuestión.
Tienen una relación grande entre ambos conceptos, cuando alguien quiere saber algo solamente traga, reproduce un conocimiento, pero cuando alguien piensa saborea lo que está conociendo es diferente, por ejemplo: cuando alguien quiere saber una fórmula matemática la ve y la reproduce (la traga), en cambio cuando vas más allá, es decir pensar, se busca entender cómo se llegó a esta fórmula y buscas aplicarla (saborear).

A través de un pensamiento se puede llegar al saber, ya que cuando alguien está muy intrigado por algo se busca una respuesta a través de diferentes herramientas, una vez que se encuentra la respuesta se arriba a un conocimiento, es decir, a un saber.
La filosofía nace con la existencia del hombre, pero como proceso sistemático de dar respuesta a diferentes preguntas nace en Grecia, se hace filosofía cuando nacen preguntas acerca de la misma existencia, generalmente filosofar es a causa de:
El asombro
 La duda
Las situaciones límites


La filosofía consiste simplemente en el arte de preguntar e intentar buscar respuestas, que en la mayoría de las veces no hay respuestas.

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